Alpicat

Alpicat es un municipio de la comarca del Segrià, que también antiguamente se conocía con el nombre de Vilanova de Alpicat, pero que ya hace muchos años se acabó cambiando por Alpicat. Alpicat se encuentra situado en una colina que domina una gran llanura.

Históricamente, Alpicat ha sobrevivido diferentes episodios que han marcado un antes y un después en su evolución. Entre éstos, podemos destacar las grandes epidemias de enfermedades como la peste, el tifus y la cólera. Tampoco podemos olvidar la presencia de los bandoleros, en concreto el bandolero Calvís, que saqueó el pueblo, ni tampoco la Guerra de los Segadores o la del Francés, que supusieron una destroza, la primera, y un descalabro, la segunda.

El edificio más característico de la población de Alpicat es la iglesia de Sant Bartomeu, construida en el siglo XVIII, sobre las bases de una antigua iglesia gótica. Su estilo es de transición, algunos elementos barrocos en el exterior y en el interior, neoclásicos. El campanario, que fue reconstruido, tiene un tejado de cerámica vidriada de color azul.

Cabe destacar Cal Negre, como casa solariega de la población. Fue construida en la primera mitad del siglo XVIII y se encuentra situada en el casco antiguo. Tiene cuatro plantas, una por la bodega, la otra por las cuadras y dos niveles más. Es de piedra picada y es la única que se conserva en tan buenas condiciones a la población, ya que es una casa de campo de una familia acomodada.

La fiesta mayor se celebra por Sant Bartomeu, el fin de semana más cercano al 24 de agosto, y se combinan actos de diferentes tipos: folclóricos, culturales, musicales, pirotécnicos, deportivos, etc. La fiesta pequeña de Alpicat se celebra por Sant Isidre, el fin de semana más próximo al 15 de mayo, y también sirve como homenaje a los padrinos mayores de 80 años, y por ello, la fiesta también se conoce con este nombre.